El Coliseo de Roma es uno de los monumentos más visitados de Italia y del mundo, y uno de los imprescindibles en Roma. Por ello, en este post te vamos a contar cómo visitar el Coliseo de Roma y todo lo que necesitas saber del mismo, para que no pierdas ningún detalle de la zona arqueológica.
Originalmente llamado Coliseo Flavio, es una de las 7 Maravillas del Mundo Moderno y ha aparecido representado en varias películas de Hollywood, como Quo Vadis (1951), Cleopatra (1963), Gladiator (2000), Ben-Hunr (1959) o Espartaco (1960). En el año 1980 fue declarado Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO.
En este lugar los ciudadanos romanos gratuitamente (no pagaban entrada) se entretenían con la lucha de gladiadores y la lucha entre esclavos y bestias salvajes.
Te recomendamos leer el post hasta el final y tenerlo a mano en tu visita, aunque vayas en una visita guiada. Siempre viene bien tener conocimiento de lo que se está viendo, para poder imaginarte cómo era antiguamente.
Para ayudar en la planificación de la visita de Roma tenemos un post en el que te contamos qué ver en Roma en 3 días.
→ Qué ver en Roma en 3 días [Itinerario + Imprescindibles + Mapa + Recorrido + Tips]
Un poco de historia…
En el año 72 d. C., el emperador Vespasiano (gobernador entre 69-79 d. C.) encargó la construcción de un anfiteatro en los terrenos Domus Aurea de Nerón. Sin embargo, no fue hasta el año 80 d. C., bajo el gobierno de su hijo Tito (gobernador entre 79-81 d. C.), que se completó su construcción.
El nombre original del anfiteatro es Coliseo Flavio, en honor al nombre familiar de Vespasiano. Durante la Edad Media se le comenzó a llamar “Coliseo” debido al Coloso de Nerón, una estatua gigante de Nerón que se encontraba cerca.
Con motivo de su inauguración, Tito celebró juegos en el Coliseo Flavio que duraron 100 días y 100 noches. El anfiteatro tiene una altura de 48.5 metros y unas dimensiones de 188 metros de largo por 156 metros de ancho. Además, cuenta con una capacidad para más de 50.000 personas, repartidas en 3 pisos, siendo el anfiteatro y una de las obras más grandes del Imperio Romano.
En el Coliseo Flavio se celebraban batallas entre gladiadores o se representaban escenas militares, mitológicas o incluso batallas navales con barcos reales (inundaban la arena y se creaba una piscina enorme), donde muchos esclavos y animales encontraban la muerte. No fue hasta el siglo V que se prohibieron los combates entre gladiadores y hasta mediados del siglo VI que se acabaron los espectáculos con animales salvajes.
A diferencia de lo que popularmente se cree o se ve en películas o series, las batallas de gladiadores rara vez acababan en muerte, ya que el patrocinador de los juegos (quien ponía el dinero) debía pagar una compensación al propietario del gladiador si éste moría en la arena, además de que el ludus se quedaría sin un esclavo más.
Tras la caída del Imperio Romano de Occidente, el Coliseo quedó prácticamente abandonado. En el siglo XII fue utilizado como fortaleza por la familia Frangipani y durante los siglos siguientes se utilizaron sus materiales de construcción para decorar otros edificios, como el Palazzo Venezia, el Palazzo Barberini y el Palazzo Cancelleria. Algo similar ocurrió muchos años antes con las Pirámides de Giza en Egipto.
En los últimos 100 años, tanto la fachada como la estructura del Coliseo se han visto muy afectados por la contaminación y las vibraciones provocadas por el metro y el tráfico.
Por ello, es muy fácil encontrarse el Coliseo con tramos del exterior tapados por andamios, ya que se están realizando constantemente obras de restauración, que por desgracias se nota demasiado al observar el anfiteatro.
Datos básicos
Zona arqueológica
Web oficial
Precio: desde 16 euros (ciudadanos de la Unión Europea 18-25 años sólo 2 euros)
Horario: apertura a las 09:00, el cierre varía mucho, mejor mirar en la web
Cuánto tiempo: 1h-1h30min
Es uno de los monumentos más importantes de la antigüedad e imprescindible.
Mucha gente y no hay un recorrido con carteles interpretativos de la historia del coliseo
Cómo llegar al Coliseo de Roma por libre
El Coliseo se encuentra en pleno centro de Roma, por lo que la mejor manera de llegar al Coliseo de Roma es andando desde donde tengas el alojamiento. Nosotros nos alojamos en el Soggiorno Downtown, a tan solo 5 minutos andando del Coliseo.
Si tu alojamiento está más lejos, puedes llegar en cualquiera de los siguientes autobuses bajándote en la parada “Colosseo”: 51, 75, 85, 87, 117, 118, MB1 y nMB.
Otra opción es bajarte en la parada “Colosseo” de la Línea B (azul) del metro.
Te recomendamos mirar en Google Maps la mejor ruta en transporte público para llegar desde tu ubicación al Coliseo de Roma.
Cómo comprar entradas para el Coliseo de Roma [PRECIOS 2023]
Las entradas al Coliseo Flavio se pueden comprar en la taquilla que está justo enfrente, al oeste. El horario de apertura es el mismo que el del Coliseo, aunque procura ir a primera hora para evitar colas y turistas dentro.
Sin embargo, te recomendamos comprar las entradas online a través de su web oficial, así te evitas perder tiempo haciendo cola en las taquillas. Lo malo es que te cobran 2 euros extra por “derecho de venta anticipada”.
Existen 3 tipos de entradas diferentes para visitar el Coliseo de Roma:
- 24h – Coliseo Foro Romano Palatino (16+2 euros): permite durante 24 horas, a partir del primer acceso, visitar el Foro Romano, el Palatino, los Foros Imperiales y el Coliseo (no incluye la visita a la arena y con una hora programada).
- Entrada Full Experience (22+2 euros) *: incluye lo mismo que la opción anterior pero se puede bajar a la arena, un imprescindible. Es la opción que elegimos nosotros y que te recomendamos.
- Entrada Full Experience – Subterráneos del Coliseo (34 euros) *: por 10 euros más puedes elegir la visita guiada a los Subterráneos del Coliseo en español, italiano o inglés, con una duración de 1h15min.
En la entrada del Coliseo hay disponibles audioguías por unos 8 euros adicionales.
Mapa del Coliseo de Roma
Este es el plano del Coliseo Flavio:
Cómo visitar el Coliseo de Roma por libre [Recorrido 1h-1h30min]
Como te hemos indicado antes en este post, te recomendamos comprar la entrada reservando la primera hora de visita del día para así evitar a todos los turistas que se van acumulando a lo largo de la mañana.
Una vez en el Coliseo Flavio, si has llegado con unos minutos de antelación, es buen momento para examinar los exteriores del anfiteatro y el Arco de Constantino, si no, tienes que buscar la puerta de entrada, que está en la zona sur de la explanada.
Arco de Constantino
En el lado oeste del Coliseo, está el Arco de Constantino que fue construido el año 315 d. C. para celebrar la victoria del emperador romano Constantino sobre Majencio en la batalla del Puente Milvio (312 d. C.). Con una altura de 25 metros es el arco más grande de Roma.
Exterior del Coliseo Flavio
La fachada exterior del Coliseo Flavio cuenta con tres niveles de arcos, enmarcados por columnas jónicas (nivel 1), dóricas (nivel 2) y corintias (nivel 3), al más puro estilo griego. Si te fijas bien, verás que tanto en el segundo como tercer piso hay varios nichos vacíos, esto es porque antiguamente estos espacios los ocupaban estatuas de mármol.
El material de construcción fue el traventino, que se sacaba de la cantera de Tivoli a 27 km del centro de Roma.
El primer nivel cuenta con 80 arcos, que formaban las entradas al Coliseo. Cuatro de ellos eran para las élites y los restantes 76 eran para senadores, nobleza y oficiales, ciudadanos romanos, mujeres y esclavos. Cada clase social tenía su propia entrada, ya que los asientos y graderías se dividían por el estatus social.
El nivel superior (Velarium), se encontraban los soportes para los 240 mástiles que sostenían el toldo que tapaba la arena para proteger a los espectadores en los días calurosos y de la lluvia. Al principio, el toldo fue de tela de vela, pero más adelante se empleó la tela de lino que era más liviana.
Después de haber contemplado todo lo que tiene que ofrecer la explanada del Coliseo, toca adentrarse en el mismo. Para ello, tienes que mostrar la entrada en la puerta sur del Coliseo a la hora reservada.
Si has reservado la primera hora de visita del día te recomendamos ir directamente a la Arena nada más pasar los tornos de entrada, para ello tienes que continuar todo recto hasta que te encuentres con otro torno. Recuerda que se necesita la entrada Entrada Full Experience para poder acceder.
También se pasa por la taquilla donde se pueden alquilar las audioguías por unos 8 euros.
La Arena
El centro del Coliseo Flavio y la razón por la que los ciudadanos romanos se acercaban a este monumento es por la Arena de Juegos.
Con forma ovalada de 75 metros de largo por 44 metros de ancho, era el lugar donde se realizaban los espectáculos, las luchas de gladiadores y las batallas navales.
Originalmente, el suelo era de madera y estaba cubierto de arena, evitando así que los luchadores resbalen por la lluvia, sudor o sangre. Desde el suelo, unas trampillas conducían al hipogeo, un complejo subterráneo de pasillos, jaulas y ascensores situados bajo el suelo de la arena.
Hoy en día, tan sólo se puede acceder a una pequeña parte reconstruida de lo que en su día era la arena, aunque es espacio suficiente para poder contemplar el anfiteatro en todo su esplendor y tomar una de las mejores fotos del viaje a Roma.
Si te acercas a la varadilla puedes ver más de cerca los cimientos de lo que se conoce como Hipogeo o Subterráneo del Coliseo (se necesita reservar previamente la visita guiada). A un lado de la entrada a la arena puedes ver una réplica en tono blanco de una pequeña parte de la gradería.
Hipogeo o Subterráneo del Coliseo
El Hipogeo o Subterráneo del Coliseo es una red de túneles bajo la arena donde se preparaban los decorados, donde esperaban los gladiadores y donde se encerraban los animales salvajes. Un corredor conectaba el hipogeo con el Ludus Magnus (escuela de gladiadores).
Desde el hipogeo se accedía a la arena a través de cualquiera de los 80 ascensores o montacargas de madera, que funcionaban con poleas tiradas por un torno. Los animales subían por una serie de rampas que accedían a las 32 trampillas repartidas por la arena.
El emperador romano accedía al Coliseo Flavio a través del llamado Passaggio di Commodo (Pasaje de Cómodo) que estaba en el Subterráneo del Coliseo. Así evitaba entrar al anfiteatro con las multitudes.
Museo del Coliseo y los muros interiores
Después de haber visitado la arena, te recomendamos retroceder al principio. Antes de subir por las escaleras (también hay ascensor) al nivel 2, puedes pararte a ver el video en el que se explica la construcción y un poco de historia del Coliseo.
En el segundo piso es donde se encuentra el Museo del Coliseo, un pequeño lugar con paneles informativos que cuentan la historia del Coliseo Flavio y con restos arqueológicos encontrados.
A diferencia de la fachada, los muros interiores del anfiteatro están hechos de ladrillo.
Siguiendo el camino puedes salir a las gradas por el vomitorio, que es como se conocía a las puertas de entrada que daban a las gradas.
Las Gradas y Vomitorio
Antes has podido contemplar el interior del Coliseo desde la arena como lo hacían los combatientes, ahora puedes hacerlo desde la perspectiva de los ciudadanos, concretamente desde la visión de la clase media y ciudadanos romanos. Esto es así porque la visita pasa por la Media Cavea, que es el nombre con el que conoce a esta sección de la gradería.
Las gradas del Coliseo Flavio se dividían en 5 niveles, en orden desde más abajo a lo más alto:
- Palco del emperador, palco del cónsul y pódium de los senadores. Se puede ver una réplica del asiento del emperador en un tono muy blanco.
- Ima Cavea, que es donde se encontraban los asientos de la nobleza y los oficiales.
- Media Cavea, que es por donde pasa la visita del Coliseo y es, como hemos indicado antes, donde se sentaba la clase media y los ciudadanos romanos.
- Summa Cavea, destinado a los hombres esclavos y pobres.
- Summum Maenianumin Ligneis, que es donde se sentaban las mujeres que no pertenecían a la nobleza.
Las entradas estaban numeradas tanto por el sector como por el asiento.
La visita continua recorriendo el pasillo de la grada hasta el otro lado del Coliseo, por donde hay que bajar las escaleras hasta el nivel 1. Antes de salir del Coliseo, puedes asomarte a la arena por un pequeño pasillo.
Así termina la visita a uno de los monumentos más importantes de la Antigua Roma y una de las 7 Maravillas del Mundo Moderno.
Mejores free tour por los alrededores del Coliseo de Roma
Antes de visitar el Coliseo Flavio por dentro, te recomendamos realizar algún free tour que hable del mismo y de otros imprescindibles de Roma. Es lo que hicimos nosotros y nos encantó, nos pareció muy útil.
Nosotros realizamos el Tour Nocturno: Coliseo y foros, muy recomendable. Otras opciones son:
- Free Tour Roma nocturna: El corazón del imperio romano (1h45min)
- La Roma Imperial (2h)
- Free tour Roma: Descubre los monumentos icónicos (2h45min)
- Historia del Imperio Romano y el Coliseo – Free tour (1h30min)
- Roma Clásica Completa – Free Tour (3h)
Civitatis también ofrece un free tour muy interesante:
Mejores visitas guiadas en el Coliseo de Roma
Si prefieres visitar el Coliseo Flavio con un guía en español, te recomendamos echar un vistazo a las siguientes opciones de Civitatis que tienen muy buenas valoraciones y muchas reservas. Además, la mayoría incluyen las visitas a otros imprescindibles de Roma:
Todos nuestros artículos sobre Roma
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Si tienes más dudas sobre cómo visitar el Coliseo de Roma, además de sobre cualquier otra duda respecto a tu viaje por Roma, no dudes en escribirnos un comentario o enviarnos un email a la siguiente dirección: polyviajeros@gmail.com
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